La interpretación es un proceso complejo y variado de comunicación que depende en gran medida del contexto en el que se da. Este contexto que, inevitablemente, es social, a menudo adquiere un significado fundamental para la interpretación. Las estructuras de poder inciden en el lugar en el que se sitúan los agentes de la comunicación y actúan a nivel profesional, legal, translacional y comunicativo.
El artículo de Guillermo R. Navarro Montesdeoca (Pym et al.) se basa en una experiencia profesional personal y real. El autor nos remite al trabajo que desempeñó en noviembre y diciembre del 2001 en el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) Barranco Seco en las Palmas de Gran Canaria, uno de los aproximadamente 10 lugares de encerramiento de personas extranjeras en situación irregular de residencia. Nos ha llamado la atención este artículo debido a que describe y teoriza el trabajo de interpretación en unas condiciones sociales de desigualdad institucional muy concreta, tanto para el intérprete como para las personas traducidas. Nos ha parecido importante rescatar una voz que cuestione el sentido de la comunicación si ésta se da en condiciones de desigualdad.
La inmigración
Creemos que en el articulo no se desarrolla lo suficientemente la realidad y el por qué de un Centro de Internamiento de Extranjeros. Los inmigrantes son retenidos en estos centros después de haber llegado a las costas españolas en cayucos, entre las ruedas, debajo de las furgonetas, etc, o bien como consecuencia de las redadas que se hacen desde la entrada en vigor de la última Ley de extranjería, Diciembre del 2009. El delito que cometen y por el cual son retenidos hasta 60 días en la cárcel, es por una falta administrativa: falta de documentación. La política migratoria de la Unión Europea, plasmada en España en esta reforma [establece que] la única nueva vía para la adquisición de autorización de residencia y trabajo en España establecida por la reforma de diciembre de 2009 es la relativa a los profesionales altamente cualificados. Una muestra más de que Europa cierra sus ojos a la realidad de la inmigración africana y que sólo expresa una visión mercantilista y egoísta del fenómeno migratorio (Profeti et al.: 9).
Se estipula que alrededor de 2 millones de personas intentan llegar de manera clandestina al territorio de la Unión Europea. De ellos, unas 2000 personas han perecido en el Mediterráneo y otras tantas en el Atlántico. Estos seres humanos - algunos de ellos, bebés dentro del vientre de sus madres, o recién nacidos y niños- salen de su país por culpa del hambre establecida durante siglos por los países europeos. Los países europeos han instaurado y siguen perpetuando el hambre en uno de los continentes más ricos del mundo y, a su vez, criminalizan a los que huyen de ella (Ziegler). Mediante la organización militar de la Unión Europea, llamada “Frontex”, la UE se defiende de los inmigrantes ilegales. Esta agencia “administra las fronteras exteriores de Europa” desde las mismas fronteras de los estados africanos del interior, pasando por las costas africanas y las aguas territoriales de los dos continentes, llegando a las costas y calles de las ciudades europeas.
Este es el contexto en el que las personas inmigrantes vienen a Europa. Navarro no especifica estos “detalles”, solamente comenta de manera somera el efecto de la globalización y de la cultura de medios de comunicación, supuestamente estas serían las que provocan la inmigración.
La comunicación
El autor del artículo plantea el problema del proceso de comunicación y basa su argumentación sobre todo en la importancia del contexto como una base que da sentido a la interpretación. Esto es, el contexto es un elemento que modifica el sentido de las palabras y muchas veces es indispensable para que se entienda el mensaje.
Según el autor, es prioritario el problema del contexto, el autor constata que el papel de la comunicación no siempre se cumple, o bien depende del contexto. Como bien dice Navarro, no se puede disociar la comunicación del contexto en el que se da.
Establece el Modelo de Comunicación en la Interpretación. La importancia que cobra el contexto en él es doble: por una parte, a modo de círculos concéntricos, tendríamos el texto en sí- Texto Original y Texto Meta. Lo rodearía el contexto interno y todo ello, a su vez, estaría rodeado del contexto externo. Las tres dimensiones estarían en permanente contacto, la comunicación fluye entre ellas. Lo que entendemos como contexto interno, son las características sociales y lingüísticas del texto, el uso que se le da a las palabras (p.ej. los códigos sociales y su reflejo en el uso en el alemán del Sie o del du), por lo cual, es necesario conocer el contexto interno para entender bien el mensaje. Desde la sociología, el contexto interno son las relaciones, enlaces que entre el lenguaje y la cultura.
A diferencia de éste, el contexto externo implica conocimiento que va más allá de lo que es lo esperado dentro de un contexto cultural, sino que depende de las circunstancias en las que se han hallado los sujetos de la comunicación. Esto implicaría una capacidad de conocimiento de información que se va conociendo dentro de la situación comunicativa. Por ejemplo, en el CIE durante el examen médico, los internados, preguntados por si han tenido fiebre, entienden por fiebre la fiebre amarilla. Debido al miedo a ser expulsados a su país, procuran no admitir que han padecido fiebre, por el médico entendida por la fiebre común. En este sentido vemos, que el contexto externo se puede delimitar cuando las relaciones de poder y política juegan un papel importante dentro del proceso comunicativo. Es importante, subraya Navarro, ver la permeabilidad entre el nivel del texto, el contexto interno y el externo: la comunicación se da a todos los niveles. La variabilidad de perspectivas desde las que se aborde la comunicación únicamente puede fomentar el mejor entendimiento del texto.
Según el autor, que aborda este problema a partir de su propia experiencia, el trabajo del intérprete en el CIE no siempre tiene como objetivo la facilitación de la comunicación. Los motivos por los cuales este propósito no se ha podido cumplir se origina en el contexto externo. Si ya hemos visto la posición inferior de partida de los inmigrantes “ilegales”, el intérprete del CIE se encuentra en una situación de desigualdad también. Obviamente, no se puede comparar con la del inmigrante encarcelado e igualado a un delincuente. La vulnerabilidad del extranjero es mucho mayor. Sin embargo, es importante porque incide en la comunicación: el intérprete sufre unas circunstancias importantes de precariedad (es pagado por debajo de su formación, contratado temporalmente y a media jornada, es el único intérprete para todo el CIE).
Navarro sitúa su trabajo de comunicador hacia los inmigrantes como un acto prescriptivo, de obediencia a la institución que le contrata. El impacto que ocasiona la institución sobre la traducción enfoca el trabajo de éste como una herramienta del Estado para dar instrucciones a los internados. Esta situación pone en duda el mismo trabajo del intérprete cuando la comunicación no es su objetivo.
Este planteamiento lleva al autor a establecer el proceso de comunicación desde la perspectiva del dinero, el poder y la mentira. Respectivamente, el autor se refiere a los recursos, las instituciones y el lenguaje. Navarro sitúa y evidencia estos planteamientos dentro del CIE: la estructura jerárquica (primero los policías, luego los médicos, los intérpretes y el personal, y, finalmente, los inmigrantes)- Como resultado de esto, el autor dice que nos encontramos ante una comunicación basada en la desigualdad social.
Nos parece interesante el enfoque que le da Navarro a la comunicación desde el punto de vista de la mentira. Se basa en el razonamiento del semiótico Umberto Eco, que constata que un sistema de signos no existe a menos que sea utilizado para mentir. Es decir, el signo puede ser sustituido por algo, que no tiene por qué precisamente existir.
Estas mentiras, en caso de los inmigrantes, estaba dictadas por el miedo (de ser expulsado) a decir la verdad (p.ej., haber sufrido la malaria). Muchos inmigrantes no hablaban bien la lengua colonial (inglés o francés) lo cual implicaba que no se disponía ni siquiera de un sistema de signos común claro para poder comunicarse.
Otra cuestión es la que cruzaría estas dos perspectivas: el dinero y el poder. Navarro incide que en, esta situación comunicativa, la traducción no se podía dar.
Concluye con la reflexión de que los intérpretes han desarrollado más herramientas para centrarse en las palabras, más que en el mensaje. No tenemos en cuenta que los signos tienen un carácter social.También subraya, que en la comunicación intralingüística no siempre el encuentro con el Otro se da en una situación de igualdad. A veces esta comunicación depende mucho del contexto dado, en caso del Centro, del contexto externo.
El trabajo del intérprete está sometido a las relaciones de poder que subyacen en cada declaración lingüística. La importancia de ver la dimensión más profunda en la comunicación, la injusticia que provoca, nos mueve a pensar de manera más crítica sobre el trabajo de cualquier comunicador, del intérprete y traductor entre ellos. Navarro declara que es así como se manifiesta la violencia del poder.
Frente a este problema, nosotros opinamos que un análisis de la situación en la que se encuentran los inmigrantes, sin investigar en las causas reales del por qué se dan y sin contar con ellos como los que sufren de verdad esta violencia estructural, nos aleja de entender en profundidad el problema de la comunicación y el poder. Igualmente, nos han parecido interesantes las reflexiones teóricas y el intento de ver éstas reflejadas en la realidad práctica de la profesión del intérprete.
BIBLIOGRAFIA:
Eco, U., 1977, A theory of semiotics, London and Basingstoke: Macmillan.
Navarro Montesdeoca, G. R., 2006, Interpreting at an immigration detention center in Las
Palmas de Gran de Canaria. Communication and power. en: “Sociocultural Aspects of Translating and Interpreting”, ed. by Pym et al., John Benjamins Publishing Co., pp.163-171
Profeti, S. et al. 2009, Derechos humanos en la frontera sur, Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía, Sevilla (recurso electrónico acceso 12-06-2010 http://www.apdha.org/index.phpoption=com_content&task=view&id=730&Itemid=45)
Ziegler, J., 2008, Los refugiados del hambre, publicado 02-03-2008 (acceso 08-06-2010),
Revista digital rebelión.org. http://www.rebelion.org/noticia.php?id=63967
(Este trabajo es un fragmento de un trabajo académico. No hemos incluido las citas del artículo por respeto a los derechos de autor. )
Zuzanna Gawron
Traductora e intérprete del polaco, español e inglés
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